Ven al Condado de Huelva y prueba los vinos del descubrimiento
Se dice que la historia del cultivo de la vid en Huelva comienza en el siglo XIV pero existen multitud de referencias legendarias de los intercambios llevados a cabo entre los tartessos y los griegos, de las partidas enviadas a Roma y de las labores de los musulmanes en la elaboración del vino. Y es que los vinos del Condado de Huelva son vinos con historia, son también los vinos del descubrimiento.
En el Condado de Huelva destaca la uva blanca zalema, propia de estas tierras.
La primera partida de vino que se envió hacia América, en el año 1502, iba cargada de vinos de Villalba del Alcor, municipio condaleño en el que fue introducido el cultivo de la vid allá por el 1327. En el Archivo de Indias se puede leer: «Era una partida de veintiséis arrobas, comprada a razón de treinta y cuatro maravedís la arroba, en Villalba del Alcor, por el mes de enero de 1502. La llevaron en botas, cuyo valor, junto con el corretaje al mojón del vino y el transporte hasta el puerto de Sevilla, importó mil cuatrocientos».
Así comenzó entonces la rica actividad comercial entre el Las Indias y el Condado de Huelva, que alcanzó una gran fama y esplendor durante el siglo XVI. Pero a mediados del siglo XVIII la Casa de Contratación se trasladó de Sevilla a Cádiz y este cambio también llevó a la provincia vecina el vino de Manzanilla. Y es que el vino ‘manzanilla’ de Sanlúcar toma su nombre de la localidad condaleña de Manzanilla. La manzanilla era un vino muy conocido y popular entre la población, una fama que pronto se trasladó a las bodegas sanluqueñas, donde se creó la denominación de origen. Hoy en día la manzanilla es un símbolo de Sanlúcar de Barrameda pero su origen se encuentra aquí, en el Condado de Huelva.
Todas estas interesantes historias sobre nuestros vinos las podrás encontrar en la Ruta del Vino Condado de Huelva. Ven a conocerla, prueba nuestros vinos y descubre nuestros sabores más puros.
